Como padre o madre, es posible que te preocupes por las heces de tu bebé, especialmente si parece que la frecuencia o el color son diferentes de lo que esperabas. Es normal ver una gran variación, y aunque esto generalmente no es motivo de preocupación, a veces puede ser una señal de que algo más está ocurriendo. Aquí te explicamos qué esperar en cuanto a color, frecuencia y qué hacer si te preocupas.
¿Qué significa el color de las heces?
Las heces de tu bebé pueden decirte mucho sobre su salud y dieta. Especialmente en los primeros días después del nacimiento, verás una sustancia oscura y pegajosa llamada "meconio". Esto se debe a que el sistema digestivo de tu bebé aún está eliminando todo lo que tragó en el útero, como el líquido amniótico y las células de la piel. Después de unos días, las heces se volverán más claras.
En los bebés amamantados, las heces suelen ser de color amarillo a mostaza y tienen una consistencia bastante líquida. Si tu bebé toma fórmula, las heces pueden ser más oscuras y más firmes. Al introducir alimentos sólidos o al usar ciertos tipos de fórmula, el color puede variar aún más. Por ejemplo, con algunas fórmulas especializadas, como las para alergias a la leche, las heces suelen ser verdes.
¿Con qué frecuencia hace caca un bebé?
La frecuencia de las deposiciones varía de bebé a bebé. Los bebés amamantados suelen hacer caca varias veces al día, a veces después de cada toma. Los bebés alimentados con fórmula pueden hacerlo con menos frecuencia, generalmente una o dos veces al día. Esto es completamente normal, siempre que tu bebé se desarrolle bien y no tenga molestias.
Si notas que tu bebé tiene dificultades para hacer caca, como heces duras o mucho llanto, esto podría ser señal de estreñimiento. En este caso, es una buena idea consultar a un médico.
¿Cuándo deberías preocuparte?
En la mayoría de los casos, no hay razón para preocuparse, especialmente si tu bebé no tiene molestias y está creciendo bien. Sin embargo, si notas sangre o mucosidad en las heces, o si las heces se vuelven repentinamente negras o blancas, es recomendable consultar a un médico. Esto podría indicar un problema subyacente, como una infección o una alergia.
Además, es importante saber que dar jugo de frutas a un bebé pequeño está muy desaconsejado. Esto podría sobrecargar innecesariamente su sistema digestivo.